Papa a las familias: Prefiero familias heridas y con arrugas porque son fruto de un amor fiel

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"El amor no es fácil. No es fácil, no. Pero es lo más lindo que un hombre y una mujer se pueden dar entre sí. El verdadero amor, para toda la vida”

Francisco escuchó el testimonio de algunas familias

"El amor no es fácil. No es fácil, no. Pero es lo más lindo que un hombre y una mujer se pueden dar entre sí. El verdadero amor, para toda la vida”

El helicóptero fue el medio de transporte con el que el Papa se movió en el estado de Chiapas durante su tercer día en México.
 
Así recorrió los 50 kilómetros que separan San Cristóbal de las Casas y Tuxtla Gutiérrez. Allí mantuvo un encuentro con miles de familias en un abarrotado estadio "Victor Manuel Reyna”.
 
Al llegar al impresionante altar, recibió el primer abrazo. Un grupo de niños no lo dudaron y lo saludaron así. 
 
Francisco escuchó el testimonio de algunas familias como la de Manuel Alejandro, un joven con una enfermedad degenerativa. Le explicó que su silla de ruedas no es un obstáculo para evangelizar.
 
A continuación ofrecieron su testimonio una pareja de ancianos con más de 50 años de matrimonio a los que el Papa abrazó con ternura.
 
Humberto y Claudia le contaron que solo están casados civilmente porque son divorciados pero que en el centro de su familia está Dios.
 
"Los divorciadosvueltos a casar no podemos acceder a la eucaristía, pero podemos comulgar a través del hermano necesitado”.
 
Antes del último testimonio sucedió esto. El Papa bajó por sorpresa del altar para bendecir a un niño en silla de ruedas demostrando qué es eso de la "cariñoterapia”.
 
Por último habló Beatriz, madre soltera. Explicó al Papa que la ofrecieron abortar en muchas ocasiones pero la Iglesia la ayudó.
 
"Santo Padre, solo pido su bendición, oración y fortaleza para las miles de mujeres que se enfrentan ante la falsa salida del aborto, para que puedan encontrarse como yo, con una Iglesia que les ama y las acoge”. 
 
Francisco agradeció el ejemplo que con su vida han dado estas personas y empezó sus palabras bromeando.
 
FRANCISCO
"¿Qué marido y qué mujer no se pelean? ¡Y más cuando se mete la suegra! Pero no importa”.
 
El Papa dijo que la familia está amenazada tanto por la colonización ideológica que la destruye como por la precariedad y el aislamiento.
 
FRANCISCO
"La precariedad no sólo amenaza el estómago y eso es ya decir mucho, sino que puede amenazar el alma, nos puede desmotivar, sacar fuerza y tentar con caminos o alternativas de aparente solución, pero que al final no solucionan nada”. 
 
Para combatir esta situación, explicó que la solución tiene que ser personal y colectiva.
 
FRANCISCO 
"Leyes y compromiso personal son un buen binomio para romper la espiral de la precariedad”.
 
Reconoció que junto a las dificultades externas, están las propias de la vida familiar, que no siempre es fácil. Sin embargo, les pidió, usando una expresión muy mexicana, que "le echen ganas a la familia”.
 
FRANCISCO
"Prefiero familias arrugadas, con heridas, con cicatrices pero que sigan andando porque esas heridas, esas cicatrices, esas arrugas es fruto de la fidelidad de un amor que no siempre les fue fácil. El amor no es fácil. No es fácil, no. Pero es lo más lindo que un hombre y una mujer se pueden dar entre sí. El verdadero amor, para toda la vida”.
 
Para terminar invitó a los esposos presentes en la celebración a que renovaran sus votos y encomendó a todas las familias a San José, al que el Papa tiene una especial devoción.
 

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