Entrevista concedida a Primeroscristianos.com por el Card. Robert Sarah, presidente del Pontificio Consejo Cor Unum, este Consejo Pontificio para la promoción humana y cristiana fue creado por el Papa Pablo VI con la Carta autógrafa Amoris officio del 15 de Julio de 1971. Cor Unum “expresa la solicitud de la Iglesiacatólica hacia los necesitados para que se favorezca la fraternidad humana y se manifieste la Caridad de Cristo”
Como cristianos no podemos actuar en una actividad caritativa o solidaria sin que esta actividad exprese nuestra fe. No somos una ONG, nosotros tenemos que expresar este amor de Dios para quienes sufren. Un cristiano que trabaja en el ámbito caritativo tiene que expresar en su acción su fe, que es lo que hizo Jesús
En este sentido, nosotros seguimos lo que Jesús comenzó y lo que también los apóstoles hicieron; porque su caridad, como expresión de su fe, era su manera de vivir.
Vosotros como jóvenes podéis hacer que la gente descubra que la verdadera felicidad no está simplemente en el dinero, en poseer cosas materiales, sino en el hecho de encontrar a Dios. La vida del hombre tiene sentido en este encuentro con Dios. Vosotros los jóvenes tenéis la confianza de los Pontífices. Tenéis la misión, no solamente de dar de comer, sino de dar de comer la comida verdadera, que es llevar a Jesús, a Dios, a las personas. Este tipo de comida es lo que le hace falta al hombre de hoy.
Los jóvenes tenéis una gran misión en el mundo de hoy, difundiendo lo que dijo Juan Pablo II, que el centro de equilibrio del mundo es la Cruz.
Tenéis que estar abiertos a la llamada de los Pontífices, a la llamada de Jesús, Él siempre tuvo una atención particular hacia los jóvenes.
Mucho. Nosotros también tenemos que mirar a Cristo, para verdaderamente involucrarnos en esta vida cristiana, tenemos que imitar en este sentido a los primeros cristianos, que fueron capaces de encontrar a Cristo de manera personal y no podían vivir sin Él.
Tenemos que experimentar a este Cristo vivo, este Cristo que tenemos en nuestras manos durante la Eucaristía y decimos amén a su voluntad. Tenemos que dejarnos inspirar por esos primeros cristianos, para que podamos creer verdaderamente en este Cristo vivo que tomamos en la Eucaristía, al que rezamos y meditamos en nuestra vida, eso es sumamente importante.
En lo que se refiere a los primeros cristianos, ellos son una riqueza que puede enriquecer nuestra experiencia personal. No podemos verdaderamente ayudar a los demás si no encontramos a Cristo en primer lugar, encarnado en la Eucaristía, en la Palabra, en el hermano que tenemos a nuestro lado.
Como todos los pontífices, el nuevo Papa es un don de Dios y su mensaje es sumamente importante. Ya en el nombre que ha escogido tiene un todo un programa para su pontificado. Sabemos que en los tiempos en que vivió San Francisco, como ahora, la Iglesia vivía momentos de crisis.
Una cosa que nos pide el Papa es una humildad más grande, de esta manera podremos verdaderamente encarnar mejor a Cristo, pues Él era humilde de corazón. El Papa mismo es una persona muy humilde y sencilla, en ese sentido, deja que el amor de Dios se vea a través de su humildad.
Otra llamada del Papa Francisco es la Evangelización, otro elemento muy importante. Como San Francisco fue llamado a ir hacia los árabes, para llevarles a Cristo, nosotros también estamos llamados a llevar a todo el mundo este amor que encontramos en Cristo crucificado.
El Papa es un gran don de Dios, como lo fueron Benedicto XVI y Juan Pablo II.
Primeroscristianos.com
{source}
