“Junto a los jóvenes, llevemos el Evangelio a todos”
Enfocamos la última semana del sínodo sobre los jóvenes celebrando la Jornada Mundial de las Misiones. El mensaje del Papa lleva este lema: “Junto a los jóvenes, llevemos el Evangelio a todos”. La fe cristiana –explica– permanece siempre joven, porque se refuerza continuamente, cuando se abre a la misión.
Es un mensaje sencillo y profundo. La vida es una misión. La fe cristiana compromete –también a los jóvenes– a transmitirla hasta los confines de la tierra. Y esto se lleva a cabo con el testimonio (la vida cristiana, que es fe con obras) del amor.
La vida es misión: “Cada hombre y mujer es una misión, y esta es la razón por la que se encuentra viviendo en la tierra”. Cuando se es joven la vida sorprende y atrae. Vivimos porque Alguien nos ha llamado para una misión: «Yo soy una misión en esta tierra, y para eso estoy en este mundo» (Exhort. ap. Evangelii gaudium, 273)
¿Qué haría Cristo en mi lugar?
Esta es la noticia que nos trae la fe cristiana, y que llena de sentido nuestra existencia. La fe da más motivos, y no menos, para afrontar el mal, como lo ha hecho Jesús. Así han hecho los mártires, así han hecho los santos. ¿Qué haría Cristo en mi lugar? Sin duda, construir puentes y derribar barreras. Es así y la misión de a Iglesia construye puentes no solo entre las culturas y las naciones, sino también entre las generaciones. Puentes que sobrepasan el tiempo, porque “fuerte como la muerte es el amor” (Ct. 8, 6) y más fuerte que la muerte. Quien ama entra en una comunión de Vida que supera los tiempos y reúne a todos en un solo Pueblo, una sola Familia y un solo Hogar –el corazón de Dios–, en el que moran todos los justos que han sido, son y serán; en un solo Cuerpo, el de Cristo, extendido a las dimensiones del cosmos y de la historia; y en un solo Templo, cuyo arquitecto es el Espíritu Santo, Espíritu del amor.
Corazones abiertos
La misión consiste en transmitir la fe hasta los confines de la tierra ¿Cómo se hace esto? Escribe Francisco: “Esta transmisión de la fe, corazón de la misión de la Iglesia, se realiza por el ‘contagio’ del amor, en el que la alegría y el entusiasmo expresan el descubrimiento del sentido y la plenitud de la vida. La propagación de la fe por atracción exige corazones abiertos, dilatados por el amor”.
En efecto, solo el amor no conoce límites. Y el amor es especialmente sensible a las extremas periferias de la fe: los alejados, los indiferentes e incluso opuestos y contrarios. También a cualquier periferia material o espiritual. He aquí una afirmación tan audaz como certera en nuestro tiempo: “Cualquier pobreza material y espiritual, cualquier discriminación de hermanos y hermanas es siempre consecuencia del rechazo a Dios y a su amor”.
Con un lenguaje accesible a los jóvenes les dice el Papa argentino que hoy los confines de la tierra parecen fácilmente “navegables” en el mundo digital. “Sin embargo –observa–, sin el don comprometido de nuestras vidas, podremos tener miles de contactos pero no estaremos nunca inmersos en una verdadera comunión de vida”.
Pero –cabría pensar– ¿no es posible lograr eso, una comunión de vida que rompa puentes y barreras, al margen de Dios, de Cristo y de la Iglesia? Quienes lo han intentado o lo intentan sin conocer el Evangelio no están “al margen” de Dios, ni de Cristo ni de la Iglesia (una cuestión distinta sería el rechazo consciente de la fe).
Le haces falta a mucha gente
Los mártires y los santos –la mayor parte no públicamente conocidos– han procurado responder a la llamada de Jesús (cf. Lc 9, 23-25). Y esto no es una cosa más que hacer en la vida. Por eso apunta Francisco: “Me atrevería a decir que, para un joven que quiere seguir a Cristo, lo esencial es la búsqueda y la adhesión a la propia vocación”. Ciertamente, a la vocación (llamada) se responde en la misión. Y todo cristiano tiene una misión. Descubrir esa misión y seguirla es lo más fascinante y transcendente que puede hacer.
En este sentido, y aludiendo a las experiencias de voluntariado y evangelización, añade el Papa que la formación de cada uno de los jóvenes no es solo una preparación para el propio éxito profesional, “sino el desarrollo y el cuidado de un don del Señor para servir mejor a los demás”.
Concluye invitando a los jóvenes para que descubran, quizá mediante esas experiencias, alimentadas por la oración y complementadas por la ayuda material, una vocación misionera:
“Nunca pienses que no tienes nada que aportar o que no le haces falta a nadie: Le haces falta a mucha gente y esto piénsalo. Cada uno de vosotros piénselo en su corazón: Yo le hago falta a mucha gente” (Encuentro con los jóvenes, Santuario de Maipú, Chile, 17-I-2018).
Ramiro Pellitero.
National Geographic cree que unos restos óseos podrían ser de unos santos mártires del siglo III
Los esqueletos podrían ser de Crisanto y Daría, dos mártires casados de Roma y que fueron enterrados vivos por hacer apostolado.
NATIONAL GEOGRAPHIC,-
Los investigadores que participan en un documental de National Geographic afirman que los dos esqueletos que se investigan en este filme podrían pertenecer a dos santos mártires casados del siglo III en Roma.
"Toda la evidencia que hemos reunido sobre estas reliquias nos muestran que serían los restos de Crisanto y Daría", señala el líder de la investigación de la Universidad de Génova, Ezio Fulcheri.
Fulcheri explicó además que "esta ha sido una oportunidad que se da muy poco, para estudiar huesos y otras reliquias que se relacionan directamente a una historia cuando ya han pasado casi 2000 años. Lo completo de los esqueletos también es extraño en mártires de ese tiempo, lo que implica que fueron protegidas y veneradas totalmente desde el principio".
Estos restos, compuestos de unos 150 huesos, fueron encontrados en 2008 en la cripta de la Catedral de la ciudad italiana de Reggio Emilia, al norte del país. Las pruebas para averiguar su "edad" arrojan que están entre los años 80 y 340 DC.
El productor general del documental "Explorador: Misterio de los Santos Asesinados", que se estrenó en Estados Unidos el 19 de abril, señaló que "esta es la primera vez que podemos probar la autenticidad de lo que se cree son reliquias de un santo. Para nosotros ha sido un privilegio hacer parte de esto".
Sin embargo, añadió, "también es posible que estos huesos no sean reales" debido a que en la Edad Media se generó un mercado negro de reliquias.
El obispo Auxiliar de Reggio Emilia, monseñor Lorenzo Ghizzoni, quien también aparece en el documental, asume asimismo este riesgo y comenta que en caso de darse el caso de que los restos sean falsos, "será destruidos porque eso sería ciertamente escandaloso para los fieles".
Crisanto y Daría
La tradición cuenta que Crisanto era el hijo único de un senador romano de Alejandría. Creció en Roma y se convirtió al cristianismo. Su padre desaprobó esta conversión y lo obligó a casarse con una sacerdotisa pagana de nombre Daría para tratar de hacerlo desistir en su nuevo camino de fe.
Sin embargo, Daría se convirtió a la fe de su esposo y se dedicaron juntos a convertir a miles al cristianismo.
Las autoridades romanas los arrestaron por proselitismo y los enterraron vivos en Roma cerca del año 283.
Esta imagen es la última de Karol Wojtyla como cardenal
Es parte de la Historia. El cardenal Wojtyla fue el último en llegar al cónclave del que salió como Juan Pablo II.
El coche en el que viajaba de camino a Roma se estropeó y tuvo que hacer lo imposible por llegar al Vaticano. Prácticamente todos los fotógrafos que esperaban la llegada de los cardenales se habían marchado pero Maurizio Riccardi no. Por eso, captó esta imagen, la última de Karol Wojtyla como cardenal.
Esta y otras muchas fotografías forman parte del trabajo de más de 30 años de este fotógrafo que siguió de cerca a Juan Pablo II, antes incluso de que fuera Papa.
MAURIZIO RICCARDI
Fotógrafo
"Lo conocí antes porque era el cardenal de mi parroquia y después empecé a seguirlo. Hay muchas fotos, desde el "Habemus Papam” a la foto de "El Papa que vuela” a las últimas fotos. Hay muchas especiales pero la que más para mí es la de Juan Pablo II que vuela, "El Papa que vuela””.
"El Papa que vuela” es esta foto, tomada durante una audiencia general en la Navidad de 1978, en el aula Nervi. Saludaba a los peregrinos con los brazos abiertos y mientras se movía, Riccardi captó esta imagen única.
Toda una vida de recuerdos compartidos con un gigante de la fe es imposible de resumir aunque hay imágenes más significativas que otras. Con esta exposición, que estará unos días en Roma, se quiere rendir homenaje a un Papa inolvidable en el décimo aniversario de su fallecimiento.
Son fotos que se centran en sus gestos, muy reconocibles: su mirada directa, cómo señalaba con el dedo cuando quería insistir en una idea, su sonrisa o la ternura que prodigaba con los peregrinos.
También hay una imagen que impactó especialmente al Papa santo, esta con su predecesor, Juan Pablo I.
MAURIZIO RICCARDI
Fotógrafo
"Se quedó encantado con la foto del Papa que vuela y, sobre todo, con la de los dos Papas. Le gusto muchísimo. Pensó que era casi como un signo. Estaba emocionado”.
Son incontables las imágenes de Juan Pablo II que este fotógrafo tiene en su archivo. Todas ellas hablan de una figura que traspasó todas las barreras y marcó la Historia para siempre.
Juan Pablo II es un ejemplo para todos los católicos. Vivió una vida tan intensa que es fácil que se le escapen los motivos por los que ha llegado tan rápido a los altares. Para ayudarle a conocerlos, le damos algunos ejemplos.
Siete puntos que hacen grande a Juan Pablo II
El rostro sonriente de Juan Pablo II en la fachada de la San Pedro. Se convierte oficialmente en un ejemplo para todos los católicos. Vivió una vida tan intensa que es fácil que se le escapen los motivos por los que ha llegado tan rápido a los altares. Para ayudarle a conocerlos, le damos algunos ejemplos.
Humanidad
Karol Wojtyla hacía con pasión todo lo que llevaba entre manos. Amaba la poesía y el teatro. Incluso fue actor y escribió una obra antes de ser sacerdote.
Además, fueron decisivos sus años en una cantera y en la fábrica química Solvay.
Juan Pablo II “Esta experiencia de obrero y a la vez seminarista clandestino me ha acompañado toda la vida. En la fábrica, para hacer mi turno de ocho horas, de día o de noche, llevaba conmigo algunos libros. Mis colegas obreros se extrañaron un poco, pero no se escandalizaron”.
Era el Papa de la puerta de al lado. Un Papa que lloraba de risa, que no tenía miedo a abrazar a las personas.
No tenía miedo
Era un hombre de fe profunda, que confiaba absolutamente en Dios. Se preparó para el sacerdocio en el seminario clandestino fundado por el cardenal de Cracovia. Fue ordenado sacerdote a escondidas, pero siempre invitó a no tener miedo a las dificultades.
“Non abbiate paura...”.
No tuvo miedo a los problemas de salud y nunca los escondió. E incluso, bromeaba con ellos.
“Un Papa caduto ma non decaduto...”.
A lo largo de su pontificado, apeló a la conciencia y no al odio para afrontar el materialismo soviético. Apostó por el entendimiento como camino a la democracia.
Salió al encuentro
Es el líder mundial más visto de la Historia. Ha visitado 129 países en 146 viajes fuera de Italia, el equivalente a tres veces la distancia entre la Tierra y la Luna.
Durante estas visitas se reunió con todo tipo de personas.
“Los mineros queremos que se ponga este casco, que sea un trabajador minero más de Catavi. ¡Creemos en Dios, Padre santo!”
Su primer viaje fue a México, un país del que se enamoró perdidamente.
Su último viaje fue en agosto de 2004, al santuario de Lourdes, en Francia, icono de los enfermos. Falleció ocho meses después.
Pidió perdón
En el Jubileo del Año 2000 pidió perdón por las culpas de la Iglesia católica.
En concreto, por las cruzadas y la inquisición, por la división entre las Iglesias, por la persecución de los judíos, por el machismo y el racismo y por las injusticias sociales.
También perdonó personalmente a Alí Agca, el terrorista que intentó asesinarle en San Pedro el 13 de mayo de 1981.
Santos asequibles
Trabajó para proponer santos cercanos a la gente. Por eso, en sus 26 años de pontificado beatificó a 1.340 personas y canonizó a 483 santos, más que la cifra sumada de sus predecesores.
Elevó a los altares a madres de familia como Gianna Beretta Mola, indígenas como Juan Diego o Kateri Tekawitha, al carismático Padre Pío, a la Madre Teresa de Calcuta o al Papa Juan XXIII.
Jóvenes
Su espíritu auténtico desataba un enorme entusiasmo entre los jóvenes.
Les propuso pasar unos días juntos cada dos o tres años. Son las Jornadas Mundiales de la Juventud. La primera fuera de Roma fue en Buenos Aires (Argentina), en 1987.
Eran encuentros que regalaron algunas de las imágenes más bellas de su pontificado.
Diálogo con religiones
Juan Pablo II tendió puentes con todas las personas. También con quienes no pensaban como él.
Fue el primer Papa que visitó una sinagoga, y llamó a los judíos “nuestros hermanos mayores”.
Juan Pablo II “Siete i nostri fratelli prediletti e in un certo modo si potrebbe dire i nostri fratelli maggiori”.
Además, visitó una mezquita, la de los Omeyas, en Siria, que custodia la tumba de San Juan Bautista.
También mejoró las relaciones con los cristianos ortodoxos, anglicanos y protestantes. Y convocó a los líderes de todas las religiones a rezar juntos por la paz en Asís, la ciudad de San Francisco.
Juan Pablo II pasará la Historia por muchos motivos. Tantos que muchos ya lo llaman Juan Pablo II el Grande.
Su vida es admirable por resplandecer en ella la fidelidad con que siguió los movimientos de la gracia.
Conoció a San Antonio Abad, vendió toda su herencia y trató de vivir una vida de contemplación
La primera edad de la Iglesia fue la de las persecuciones que se desataron contra ella, suscitadas principalmente por el Imperio romano durante tres siglos. A esa época le sucedió una era de paz iniciada por el emperador Constantino, que en el año 313 declaró lícito el culto cristiano y él mismo se convirtió al cristianismo. Si en la primera etapa floreció principalmente la fe heroica de los mártires, que ornaron a la Iglesia con la púrpura de su sangre; en la segunda se vieron pulular ejemplos de virtudes sólidas y perfectas.
El 21 de octubre la Iglesia celebra la fiesta de San Hilarión, abad, nacido en Tabatha, cerca de la ciudad de Gaza, en Palestina, Su vida es admirable por resplandecer en ella la supremacía del espíritu y la fidelidad con que siguió los movimientos de la gracia. Unas mociones que le llevaron al desierto, viviendo largos años en la contemplación y desasimiento del mundo material y otras veces le hicieron dedicarse a hacer el bien a aquellos que, subyugados por su ejemplo, le piden que les deje imitar su vida bajo su dirección, y a socorrer milagrosamente con actos de caridad espiritual y corporal a las gentes afligidas que acuden a él implorando su socorro.
La fecha de su nacimiento no consta abiertamente, pero podemos deducirla por el aserto de San Jerónimo, quecuenta que a la muerte de San Antonio (en el año 356), tenía Hilarión sesenta y cinco años de edad. Llamó poderosamente la atención allá donde fue por su abstinencia, recogimiento, oración, humildad, caridad y estupendos milagros, y liberación de espíritus impuros.
Algunos han negado su historicidad, creyéndolo un engendro de la imaginación de los primeros siglos cristianos; pero eso es insostenible ante el testimonio concorde de los escritores más autorizados. San Jerónimo, sobre todo, en su Vita Patrum; San Atanasio, San Epifanio, Sozomeno (que dice que él mismo estaba emparentado con Hilarión), Surio, Metafrastes, Lipomano, Hesiquio (discípulo e íntimo de Hilarión), cuyas citas pueden verse en "Acta Sanctorum" compiladas por el padre Víctor van Bruck, S. I., el cual reproduce la "Vita S. Hilarionis", de San Jerónimo, tomada de varios códices de Bruselas. Y últimamente el profesor Juan Pedro Kirsch, catedrático de Arqueología de la Universidad de Friburgo, da cuenta de un ejemplar descubierto por Papadopoulos-Kerameus, de una vida de San Hilarión, escrita en griego.
Aunque era palestino, Hilarión no era judío, pues los israelitas tenían sus confines muy delimitados. Era, pues, la suya una familia pagana, de posición acomodada. Según lo describe San Jerónimo, cuando salió de su casa para ir a cursar los estudios a Alejandría, emporio entonces del saber humano, era un jovencito de quince años, rubio, de complexión delicada, pero dotado de un alma noble, una voluntad férrea y hambriento de la verdad, cualidades todas que se adaptaban a maravilla para recibir la fe cristiana, la cual, de hecho, recibió en Alejandría. No tenemos pormenores de su conversión; podemos suponer que entre sus condiscípulos los había cristianos, que no serían los peores en su conducta ni los menos distinguidos por su aplicación y aprovechamiento en aquella sede fundada por San Marcos, ilustre por el martirio de Santa Catalina y cuna del gran doctor de la Iglesia San Atanasio.
Hilarión oyó hablar de aquel anacoreta que en el desierto de Egipto llevaba una vida de ángel sobre la tierra, que lo había renunciado todo por imitar más de cerca a Cristo, y no por curiosidad, sino con sincero deseo de aprovecharse, se fue en busca del abad Antonio y lo halló en la Arcadia, extenso territorio desierto en el delta del Nilo. Dice San Jerónimo que, cuando San Antonio vio a San Hilarión, le dirigió este saludo: Bene venisti, Lucifer, qui mane oriris ("Bienvenido, Lucifer, que te levantas al amanecer”), que es la frase que en el profeta Isaías se refiere al ángel caído y que San Antonio la aplica en sentido contrario a Hilarión.
"Dos meses—dice el padre Van Bruck—permaneció con el santo anacoreta, para observar sus costumbres, guardar en su corazón sus palabras y conformar después su vida con aquélla." Cuando a los veintiséis años volvió al hogar paterno se encontró con dos acontecimientos: habían muerto sus padres y quedaba constituido dueño de una pingüe herencia, Lo primero, claro está, le causó dolor; pero, en cuanto al propósito que llevaba en su corazón, le libraba de los lazos que pudieran impedírselo. En cuanto a lo segundo, tenía presente el ejemplo de San Antonio, que, joven como él, había seguido el consejo divino: "Ve, vende cuanto tienes y dáselo a los pobres. Luego ven y sígueme", y así lo realizó. Se estableció en el desierto de Majuma, cerca de Gaza, y allí observó un género de vida similar al de San Antonio. Vestía una camisa de pelo de camello; una túnica exterior tejida de lo mismo y una cogulla.
Vivió la virtud de la sobriedad de una manera particularmente heroica. Es por esto que fue apreciado por gente conspicua como San Epifanio, obispo de Salamina (Chipre); Dracontius, obispo de Hermópolis; Philor, obispo cireneo, y Siderio, obispo de Palebiscenum. Además, evangelizó el país de los nabateos, dejando muy bien dispuesto a su jefe Elusates para su ingreso en la Iglesia.
Realizó varios milagros. El deseo de huir del aura popular que lo admiraba, tanto por su vida virtuosa como por sus milagros en curar las dolencias del cuerpo y las posesiones del demonio, le hacía ansiar la soledad. Finalmente, la amenaza de Juliano el Apóstata, que había ya destruido su monasterio de Majuma el año 362, le obligó a embarcarse en el puerto de Alejandría en la primera nave que partiera. Ésta lo hizo con rumbo a Sicilia. Sin embargo, sus milagros le iban delatando, y así hubo de salir de Sicilia, desde donde pasó a la Dalmacia, estableciéndose en Epidaurum, con Hesiquio. Pero alli también hizo milagros y la gente le buscaba no por su fe, sino por sus milagros.
Deseoso de vivir desconocido, partió para Chipre juntamente con Hesiquio, al que envió a Palestina para visitar a los hermanos y ver las cenizas de su antiguo monasterio. Se estableció en un lugar fragoso llamado Bucolia, donde no había cristianos, sino gente feroz, pero los amansó su virtud y la curación de uno de sus jefes. Cinco años permaneció en aquella soledad, al cabo de los cuales, sintiéndose morir a sus ochenta años, dejó escrito brevemente a Hesiquio que le dejaba su Evangelio, su túnica, su cogulla y un pequeño manto. Corrió la voz de que moría el Santo y acudieron a él algunos cristianos de Pafos, que pudieron oírle: "Sal, sal, alma mía ¿Por qué temes? ¿Ya cerca de setenta años que sirves a Cristo y temes?" Y con esto expiró. Llegó la noticia a Hesiquio en Palestina, que partió al punto para Chipre, personándose en el lugar de la sepultura y, simulando querer vivir allí, trasladó ocultamente las reliquias del Santo, que con avidez fueron recibidas en Chipre, en Palestina y en toda el Asia Menor.
La Iglesia católica cuenta con 7 nuevos santos. Con esta fórmula en latín, pronunciada por Francisco, fueron elevados a los altares Pablo VI, monseñor Óscar Romero, las religiosas Nazaria Ignacia y María Catalina Kasper, los sacerdotes Francesco Spinelli y Vincenzo Romano y el jóven laico Nunzio Sulprizio.
“Declaramos y definimos santos y les inscribimos en el libro de los Santos”.
En su homilía el Papa reflexionó sobre la parábola del joven rico que rechazó unirse a Jesús. Francisco explicó que no todo se puede comprar o está sometido a la ley de la oferta y la demanda. Para seguir a Cristo, dijo, es necesario algo más.
FRANCISCO “Ven, no te quedes parado, porque para ser de Jesús no es suficiente con no hacer nada malo. Sígueme, no vayas detrás de Jesús solo cuando te apetezca, sino búscalo cada día; no te conformes con observar los preceptos, con dar un poco de limosna y decir algunas oraciones”.
Por eso, Francisco recordó que hce falta dejar espacio en el corazón para Dios en lugar de tenerlo lleno con otras cosas.
FRANCISCO “La riqueza es peligrosa y, – dice Jesús–, dificulta incluso la salvación. No porque Dios sea severo, ¡no! El problema está en nosotros: el tener demasiado, el querer demasiado sofoca nuestro corazón y nos hace incapaces de amar. Nuestro corazón es como un imán: se deja atraer por el amor, pero solo se adhiere por un lado y debe elegir entre amar a Dios o amar las riquezas del mundo; vivir para amar o vivir para sí mismo”.
El Papa invitó a rezar para pedir la gracia de liberarse de las seguridades del mundo y confiar plenamente en Jesús.
FRANCISCO “Sin un salto hacia adelante en el amor, nuestra vida y nuestra Iglesia se enferman de “autocomplacencia egocéntrica”: se busca la alegría en cualquier placer pasajero, se cierra en la murmuración estéril, se acomoda en la monotonía de una vida cristiana sin ímpetu, en la que un poco de narcisismo cubre la tristeza de sentirse imperfecto”.
Por último, aseguró que aligerar el corazón de bienes hace que sea más libre para amar a Dios y transmitir la alegría. Tal y como hicieron estos nuevos siete santos.
Fuente: Rome reports
Homenaje a todos aquellos que han sufrido por confesar su fe
El 17 de octubre de 2018 la Iglesia recuerda a San Ignacio de Antioquía, mártir del siglo segundo que, por su amor apasionado a Jesucristo dejaría una huella imborrable en los cristianos de su época y en la Iglesia para siempre.
En su fiesta, la Fundación EUK Mamie-HM Televisión, a través de su «Proyecto Despierta», ha querido rendir un homenaje a todos aquellos que, en todos los rincones del mundo, desde los comienzos del cristianismo hasta nuestro siglo XXI, han sufrido por confesar su fe o han sido martirizados por el Nombre de Jesucristo y su Santa Iglesia.
Antiguos confesores de la fe y recientes mártires, que han sabido despertar la fe de todo un pueblo con su grito de amor a Dios, devolviendo «sangre por Sangre» y «vida por Vida», porque es preciosa a los ojos de Dios la muerte de los que cada día derraman su vida por Él.
Siéntete orgulloso de pertenecer a esta Iglesia que ama hasta el final.
VATICANO - Las estadísticas de la iglesia católica 2018
Ciudad del Vaticano (Agencia Fides) – Con motivo de la 92° Jornada Misionera Mundial, el domingo 21 de octubre de 2018, la Agencia Fides presenta algunas estadísticas seleccionadas para ofrecer un cuadro panorámico de la Iglesia misionera en el mundo.
Las tablas han sido extrapoladas del último «Anuario Estadístico de la Iglesia» (actualizado a día 31 de diciembre de 2016) y se refieren a los miembros de la Iglesia, sus estructuras pastorales, las actividades en el campo sanitario, asistencial y educativo. Entre paréntesis se indica la variación, aumento (+) o disminución (-) con respecto al año anterior, según la comparación efectuada por la Agencia Fides.
Población mundial
A día 31 de diciembre de 2016 la población mundial era 7.352.289.000 personas, con un aumento de 103.348.000 unidades respecto al año anterior. El aumento global este año también se refiere a todos los continentes, incluida Europa que vuelve a crecer por segundo año consecutivo tras las disminuciones de años anteriores. Los aumentos más consistentes, se dan de nuevo en Asia (+49.767.000) y en África (+42.898.000), seguidos por América (+8.519.000), Europa (+1.307.000) y Oceanía (+857.000).
Número de católicos y porcentaje
En la misma fecha, a 31 de diciembre de 2016, el número de católicos era de 1.299.059.000 personas, con un aumento total de 14.249.000. El aumento interesa a todos los continentes, excepto por tercer año consecutivo de Europa (-240.000), que como el año pasado registra una disminución mayor. Aumentan en África (+6.265.000) y América (+6.023.000), seguidas por Asia (+1.956.000) y Oceanía (+245.000).
El porcentaje mundial de católicos ha disminuido del 0,05%, igual que el año pasado, situándose en un 17,67%. Con respecto a los continentes, se registran aumentos en América (+0,06), Asia (+0,01) y Oceanía (+0,02). Y disminuciones en África (-0,18) y Europa (-0,11).
Habitantes y católicos por sacerdote
El número de habitantes por sacerdote ha aumentado este año, complesivamente de 254 unidades alcanzando la cuota de 14.336. La distribución por continentes ve incrementos en África (+271), América (+108), Europa (+66) y Oceanía (+181). La única disminución es en Asia (-264).
El número de católicos por sacerdote ha aumentado de 39 unidades, alcanzando el número total de 3.130. Se registran aumentos en África (+7), América (+74), Europa (+22), y Oceanía (+52). Se confirma una disminución, con la misma cifra del año anterior, en Asia (-13).
Circunscripciones eclesiásticas y estaciones misioneras
Las circunscripciones eclesiásticas son 10 más que el año precedente, es decir 3.016, con nuevas circunscripciones creadas en África (+3), América (+3), Asia (+3) y Europa (+1). Oceanía queda sin variaciones como en años anteriores.
Las estaciones misioneras con sacerdote residente son complesivamente 2.140 (581 más, al contrario del año pasado que se habían reducido). Sólo han disminuido en África (-63), mientras que han aumentado en América (+98), Asia (+151), Europa (+364) y Oceanía (+31).
Las estaciones misioneras sin sacerdote residente han disminuido en total de 513 unidades, situándose en 142.487. Aumentan en África (+135), Europa (+456) y Oceanía (+91). Disminuyen en América (-35) y Asia (-1.160).
Obispos
El número de Obispos en el mundo ha aumentado de 49 unidades, alcanzando el número de 5.353. Aumentan los obispos diocesanos y también los religiosos. Los obispos diocesanos son 4.090 (27 más), mientras los religioso son 1.263 (22 más).
El aumento de los obispos diocesanos se produce en América (+20), Asia (+9) y Europa (+3), mientras disminuyen en África (-2) y Oceanía (-3). Los obispos religiosos aumentan en todos los continentes con la excepción de Asia (-7): África (+5), América (+14), Europa (+8), Oceanía (+2).
Sacerdotes
El número total de sacerdotes en el mundo este año también ha disminuido, alcanzando una cuota de 414.969 (-687). De nuevo, se señala una disminución considerable en Europa (-2.583) a la que se suma este año América (-589). Los aumentos se dan en África (+1.181) y Asia (+1.304), Oceanía se mantiene estable.
Los sacerdotes diocesanos en el mundo han aumentado globalmente de 317 unidades, alcanzando el número de 281.831, con la única disminución también este año, en Europa (-1.611) y aumentos en África (+983), América (+180), Asia (+744) y Oceanía (+21).
Los sacerdotes religiosos han disminuido en total de 1.004 unidades, el triple del año pasado, y ahora son 133.138. Consolidando la tendencia de los últimos años, han aumentado en África (+198) y en Asia (+560), pero han disminuido en América (-769), Europa (-972) y Oceanía (-21).
Diáconos permanentes
Los diáconos permanentes en el mundo este año también han aumentado de 1.057 unidades, alcanzando el número de 46.312. El aumento más consistente se confirma una vez más en América (+842), seguida por Europa (+145), Oceanía (+45), África (+22) y Asia (+3).
Los diáconos permanentes diocesanos en el mundo son 45.609, con un aumento total de 982 unidades. Crecen en todas partes excepto en Asia (-38): África (+36), América (+807), Europa (+130), Oceanía (+47).
Los diáconos permanentes religiosos son 703, aumentando de 75 unidades con respecto al año anterior. Disminuyen en África (-14) y Oceanía (-2), pero aumentan en Asia (+41), América (+35) y Europa (+15).
Religiosos y religiosas
Los religiosos no sacerdotes han disminuido por cuarto año consecutivo, al contrario de la tendencia de años anteriores, de 1.604 unidades, situándose en 52.625. Las disminuciones, mucho más consistentes que el año pasado, se han registrado en todo el mundo: África (-50), América (-503), Asia (-373), Europa (-614) y Oceanía (-64). Se confirma la tendencia a la disminución global de las religiosas, disminuyendo de 10.885 unidades, inferior con respecto al año pasado. Son en total 659.445. Los aumentos se registran otra vez, en África (+943) y en Asia (+533), las disminuciones en América (-3.775), Europa (-8.370) y Oceanía (-216).
Institutos seculares
Los miembros de los Institutos seculares masculinos son en total 618, y este año disminuyen (-79) tras el aumento del año pasado. A nivel continental crecen en África (+2) y Asia (+4), disminuyen en América (-77) y Europa (-8), este año vuelve a quedar sin variaciones Oceanía.
Los miembros de los Institutos seculares femeninos han disminuido de 459 unidades, siendo así un total de 22.400 miembros. Aumentan sólo en África (+113), disminuyen en América (-33), Asia (-35), Europa (-502) y Oceanía (-2).
Misioneros laicos y catequistas
El número de Misioneros laicos en el mundo es de 354.743, con un aumento global de 2.946 unidades, particularmente sensible en América (+4.728) y África (+759). Y disminuciones en Asia (-1.565), Europa (-921) y Oceanía (-55).
Los Catequistas en el mundo han disminuido un total de 36.364 unidades, situándose en 3.086.289. El único aumento ha sido en África (+10.669). Disminuyen en América (-20.407), Asia (-12.896), Europa (-13.417) y Oceanía (-313).
Seminaristas mayores
El número de seminaristas mayores, diocesanos y religiosos, este año también ha disminuido globalmente, exactamente de 683 unidades, alcanzando el número de 116.160. Los aumentos se han registrado en África (+1.455) y en menor medida en Asia (+9), mientras disminuyen en América (-1.123), Europa (-964) y Oceanía (-60).
Los seminaristas mayores diocesanos son 71.117 (+999 respecto al año anterior) y los religiosos 45.043 (-1.682). Para los seminaristas mayores diocesanos los aumentos se producen en África (+1.059), América (+16) y Asia (+310). Las disminuciones han sido en Europa (-381) y Oceanía (-5). Los seminaristas mayores religiosos aumentan sólo en África (+396), mientras que disminuyen en América (-1.139), Asia (-301), Europa (-583) y Oceanía (-55).
Seminaristas menores
El número total de seminaristas menores, diocesanos y religiosos, este año al contrario del precedente, ha disminuido de 2.735 unidades, situándose en 101.616. Han disminuido en todos los continentes: África (-69), América (-1.299), Asia (-871), Europa (-581) y Oceanía (-5).
Los seminaristas menores diocesanos son 78.369 (-1.729) y los religiosos 23.247 (-1.006). Para los seminaristas diocesanos el aumento se registra en África (+236) y Oceanía (+7). La disminución en América (-684), Asia (-988) y Europa (-300).
Los seminaristas menores religiosos por su parte aumentan sólo en Asia (+207). Disminuyen en África (-305), América (-615), Europa (-281) y Oceanía (-12).
Institutos de instrucción y educación
En el campo de la instrucción y la educación la Iglesia administra en el mundo 72.826 escuelas infantiles frecuentadas por 7.313.370 alumnos; 96.573 escuelas primarias con 35.125.124 alumnos; 47.862 institutos de secundaria con 19.956.347 alumnos. Además sigue a 2.509.457 alumnos de escuelas superiores y 3.049.548 estudiantes universitarios.
Institutos sanitarios, de beneficencia y asistencia
Los institutos de beneficencia y asistencia administrados en el mundo por la Iglesia engloban: 5.287 hospitales con mayor presencia en América (1.530) y África (1.321); 15.937 dispensarios, la mayor parte en África (5.177), América (4.430) y Asia (3.300); 610 leproserías distribuidas principalmente en Asia (352) y África (192); 15.722 casas para ancianos, enfermos crónicos y discapacitados la mayor parte en Europa (8.127) y América (3.763); 9.552 orfanatos en su mayoría en Asia (3.660); 11.758 guarderías con el mayor número en Asia (3.295) y en América (3.191); 13.897 consultorios matrimoniales, en gran parte en Europa (5.664) y América (4.984); 3.506 centros de educación o reeducación social y 35.746 instituciones de otros tipos.
Circunscripciones eclesiásticas dependientes de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos
Las circunscripciones eclesiásticas dependientes de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos (Cep) a fecha de octubre de 2018 son en total 1.114, tres circunscripciones más respecto al año pasado. La mayor parte de las circunscripciones eclesiásticas dependientes de Propaganda Fide se encuentran en África (511) y en Asia (482). Seguidas por América (75) y Oceanía (46).
(S.L.- Agencia Fides 21/10/2018)
Santa Irene - siglo VI
Irene era una joven noble de Nebancia, Portugal. Era tan bella como piadosa y un joven se prendó de ella al verla en la iglesia.
La pidió en matrimonio y fue rechazado, explicándole Irene que había hecho voto de virginidad y que se si seguía siendo buen cristiano, se verían en el paraíso. El joven lo aceptó, pero poco tiempo después, un maestro de Irene que intentó seducirla y fue arrojado de su casa, para vengarse, corrió a contar al joven que Irene pronto sería madre. Este, loco de rabia, la mató al salir de la iglesia y arrojó su cuerpo al río.
La encontraron en la orilla del río Tajo, frente a la villa de Scalabis que desde entonces se llama Santarem (Santa Iria o Irene). Esta santa es muy querida en Portugal y en España.
SAN IGNACIO DE ANTIOQUÍA NOS HABLA DE LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS
Nos habla san Ignacio de Antioquía. Siglo I-II. Los primeros cristianos están dispuestos a dar su vida por la unidad de la Iglesia. Se esfuerzan por mantener unido el rebaño de Cristo, que empieza a verse atacado y zarandeado por herejías, infidelidad, etc. Del mismo modo San Ignacio de Antioquía, camino de su martirio en Roma hacia el año 107, no deja de insistir, a los cristianos de las diferentes iglesias a las que escribe, en la importancia de velar por esta unidad…
TEXTOS DE LOS PRIMEROS SIGLOS SOBRE LA UNIDAD DE LA IGLESIA
1.
Ahora bien, “como hijos de la luz verdadera” (Ef 5, 8), huid de toda escisión y toda doctrina perversa; en cambio, donde esté el pastor, allí debéis, como ovejas,seguir vosotros. Porque muchos lobos, que se presentan como dignos de todo crédito, cautivan con funesto placer a los corredores de Dios. Sin embargo, gracias a vuestra unión, no tendrán entre vosotros cabida alguna. (SAN IGNACIO DE ANTIOQUÍA, A los de Filadelfia, 2-3)
2. Me adelanto a exhortaros a que viváis unidos en el sentir de Dios. En efecto, Jesucristo, nuestra vida inseparable, expresa el sentir del Padre, como también los obispos, esparcidos por el mundo, son la expresión del sentir de Jesucristo.
Por esto debéis estar acordes con el sentir de vuestro obispo, como ya lo hacéis. Y en cuanto a vuestro colegio presbiteral, digno de Dios y del nombre que lleva, está armonizado con vuestro obispo como las cuerdas de una lira. Este vuestro acuerdo y concordia en el amor es como un himno a Jesucristo. Procurad todos vosotros formar parte de este coro, de modo que, por vuestra unión y concordia en el amor, seáis como una melodía que se eleva a una sola voz por Jesucristo al Padre, para que os escuche y os reconozca, por vuestras buenas obras, como miembros de su Hijo. Os conviene, por tanto, manteneros en una unidad perfecta, para que seáis siempre partícipes de Dios. (SAN IGNACIO DE ANTIOQUÍA, A los Efesios, 2, 2)
3.
Y es así que, cuantos son de Dios y de Jesucristo, ésos son los que están al lado del obispo. Ahora que, cuantos, arrepentidos, volvieren a la unidad de la Iglesia, también ésos serán de Dios, a fin de que vivan conforme a Jesucristo.«No os llevéis a engaño», hermanos míos. Si alguno sigue a un cismático, «nohereda el reino de Dios» (1 Cor 6, 9). El que camina en sentir ajeno a la Iglesia, ése no puede tener parte en la pasión del Señor. (SAN IGNACIO DE ANTIOQUÍA, A los de Filadelfia, 2-3)
4. Si tanta fuerza tiene la oración de cada uno en particular, ¿cuánto más la que se hace presidida por el obispo y en unión con toda la Iglesia? (SAN IGNACIO DE ANTIOQUIA, Carta a los Efesios, 2)