Tres meses con el Papa León XIV
Han pasado solo tres meses. A las 18:07, una densa columna de humo blanco se elevó desde la chimenea de la Capilla Sixtina, anunciando al mundo que la Iglesia católica tenía un nuevo líder. Una hora después, a las 19:22, se reveló su nombre y rostro: el papa número 267, **León XIV**.
Desde entonces, los católicos de todo el mundo han comenzado a conocer a su nuevo pastor. A medida que su pontificado avanza, los fieles han descubierto a un líder que se acerca a las personas y trae un mensaje de fe renovado.
Un Papa que nos acerca a Jesús
Muchos lo ven como un "papa puente" que conecta a la gente con Jesús de una manera más cercana y tangible. Su potencial para transmitir el mensaje del Evangelio de forma actual es una de sus cualidades más destacadas.
"Siento que es un 'papa puente' porque nos acerca a Jesús", dice un fiel. "A veces algunos lo podrán ver como que fue hace muchos años o que lo que dijo ya pasó, y él nos lo aterriza y nos hace, pues eso, sentirnos en una familia. Que es nuestro padre". Su sencillez y calidez han ayudado a muchos a fortalecer su fe y a sentir que la vida, con Cristo, se vuelve mucho más sencilla.
Energía y vitalidad para la juventud
Además de su calidez, la vitalidad del papa León XIV ha llamado la atención. Su energía es especialmente notable en su conexión con los jóvenes, un aspecto que los fieles ven como una gran fortaleza para la Iglesia.
"A mí me ha encantado la vitalidad del papa", comenta otro fiel. "La energía, cómo atrae a los jóvenes, como desde esa fortaleza se muestra... Ahora que fue el Jubileo, también, de los jóvenes... pues creo que esa parte de vitalidad hace mucha falta. Levantar especialmente desde las masas de los jóvenes y en esa unidad. Eso me ha encantado".
Un pontificado que genera esperanza
En estos primeros meses, el papa León también ha demostrado su cercanía con todos los fieles, no solo con los jóvenes. Muchos auguran un pontificado fructífero, lleno de esperanza y paz.
"Es una bendición el papa León", asegura un creyente. "Lo percibimos como un papa muy cercano, muy de la Iglesia, muy del pueblo que siempre nos está pidiendo que recemos por la paz. Muy sonriente, y la verdad que transmite él también mucha paz, mucha serenidad, y creo que va a ser un gran impulsor para estos próximos años de la Iglesia católica".
Aunque el papado de León XIV recién comienza y enfrenta grandes desafíos, como el diálogo con un mundo cada vez más secularizado y la implementación de medidas para prevenir abusos, su cercanía y calidez han dejado una primera impresión muy positiva. Aún es pronto para saber todo lo que nos deparará este pontificado, pero sin duda, el papa León XIV ha iniciado su camino con una energía que invita a la esperanza.
AM. Rome Reports.