El Papa León XIV apareció por sorpresa en la Plaza de San Pedro, para saludar a los miles de participantes de la Misa de bienvenida del Jubileo de los Jóvenes, este martes 29 de julio.
Después de recorrer la abarrotada plaza, en la que miles de jóvenes agitaban las banderas de sus países, el Santo Padre les dirigió unas palabras desde el altar principal. “Buona sera, buenas tardes, good evening”, dijo León XIV, provocando el alboroto de la multitud.
Al terminar el Pontífice subió a la zona del altar para dedicar estas palabras:
¡Vosotros sois la sal de la tierra, luz del mundo! Y hoy sus voces, su entusiasmo, sus gritos, que todos son por Jesucristo, y ¡los van a escuchar hasta el fin del mundo!
Al final dedicó un saludo final en italiano y un último mensaje que pidió que se repitiera por toda la plaza.
La emoción de los jóvenes se unía al sentido llamamiento del Papa por la paz:
“Esperamos que todos vosotros seáis siempre signos de esperanza en el mundo. Hoy estamos empezando. En los próximos días tendréis la oportunidad de ser una fuerza que pueda llevar la gracia de Dios, un mensaje de esperanza, una luz a la ciudad de Roma, a Italia y al mundo entero. Caminemos juntos con nuestra fe en Jesucristo. Y nuestro grito debe ser también por la paz en el mundo. Digamos todos: ¡Queremos la paz en el mundo! Recemos por la paz”.
“Oremos por la paz -invitó el Papa- y seamos testimonios de la paz de Jesucristo, de la reconciliación, esta luz del mundo que todos estamos buscando”.
Y luego de la bendición, el Pontífice les deseó una buena semana de permanencia en Roma, y la invitación encontrarse de nuevo el próximo 2 y 3 de agosto para la vigilia y misa del Jubileo de los jóvenes: “Nos vemos en Tor Vergata”.